jueves, 18 de agosto de 2016

Visita guiada a la Catedral de Paraná, Nuestra Señora del Rosario.

Catedral de Paraná.
Monumento Histórico Nacional, desde 1942.

Antecedentes históricos:

   La Historia de la Catedral de Paraná comienza el 23 de octubre de 1730 cuando el gobernador del Río de la Plata, decretó la erección del curato del Pago de la otra Banda del Paraná, creando la Parroquia de Nuestra Señora del Rosario.
  Para comprender estas disposiciones, debemos tener en cuenta que constituyen los primeros actos gubernativos de las autoridades españolas para la organización del territorio que más tarde debía formar el cuerpo político denominado Entre Ríos.” Debe considerarse que una Parroquia en aquel entonces no era una institución de orden puramente eclesiástico sino que además tenía funciones políticas y administrativas.
    El cura oficiaba también como funcionario público, y por ello para la creación de una parroquia era indispensable la intervención de las autoridades superiores del gobierno.Tenía a su cargo el registro de nacimientos y defunciones de los pobladores.
    Se designa canónicamente cura del Pago de la otra Banda del Paraná al Presbítero Francisco Arias Montiel ordenándose el 5 de abril de 1731 por el Cabildo Eclesiástico de Buenos Aires que se le entreguen los objetos de culto, alhajas y bienes pertenecientes a la Capilla de San José del Rincón con la imagen de Nuestra Señora del Rosario que se encontraba en esa localidad de Santa Fe para aplicarlos al servicio y culto de la iglesia parroquial.
   Así el 27 de agosto de 1731 el Padre Arias Montiel, en el desolado pago de la Baxada recibió la imagen a la que se otorgaba el Patrocinio de la Villa. La Virgen fue traída provisoriamente pero quedó definitivamente en Paraná.

Cómo llega la imagen de la Santísima Virgen del Rosario a Paraná.
   Esta imagen de tipo español, fue traída en la expedición de Juan de Garay en el año 1573, y en un principio se llevó a Santa Fe. Finalmente fue trasladada al rincón de Antón , hoy San José del Rincón.
   Quemada la Capilla de esa población por los idígenas de la zona, fue traida a las costas de la Baxada por considerarse que estaría más protegida y quedó a cargo del Cura Arias Montiel, en este humilde templo de paja y barro en la costa entrerriana. Fue enviada en 1731 entre bienes y alhajas que se ceden a la Capilla del Pago del Paraná.

Arquitectura – Estilo. - Arquitecto: Juan Bautista Arnaldi -
    Nuestra Catedral es de estilo ”ecléctico”, es decir que no corresponde con pureza a ningún estilo en particular, no es renacentista, ni barroco, ni gótico, ni neoclásico. Está por el contrario, conformada por una mezcla de estilos, que han sido utilizados de la manera que resultaban más convenientes. Con esto el arquitecto logra resolver el remate de la fachada posterior trabajando con un estilo poco costoso y de menor complejidad. Con el mismo criterio, para resaltar y destacar el ingreso, se utilizó el estilo más representativo de la grandeza y la sobriedad.

Este edificio sagrado, es la Catedral Metropolitana, Parroquia Nuestra Señora del Rosario. En él se venera la antiquísima imagen, que fuera declarada Patrona de la Villa de Paraná en forma única y primera en la Historia Patria. Por elección popular con voto general libre y secreto, en la Plaza Mayor de Paraná, donde sobre el brocal del aljibe se colocó una urna para dirimir la cuestión sobre si sería Patrón San Miguel o Nuestra Señora del Rosario. Al pie de la torre izquierda de nuestra Catedral, podemos observar una placa recordando tan importante acontecimiento.
    El 25 de junio de 1813, la Asamblea dispuso que el pueblo de la Bajada del Paraná, fuera elevado al rango de Villa “bajo la advocación de Nuestra Señora del Rosario”.

   Es el cuarto templo edificado en el lugar. Fue inaugurado en 1886 y completado en 1900. El 1º de enero de 1883 se bendijo solemnemente la piedra fundamental. Comenzó su construcción por el ábside, las capillas presbiteriales, el crucero y luego las torretas de la fachada posterior.

   Se le pidió al arquitecto interviniente Juan Bautista Arnaldi, una obra que “ ya sea por su grandiosidad, su arquitectura y solidez, su extensión y ornatos, corresponda mejor al honor y a la dignidad de una Catedral. “De hecho que sigue y seguirá manteniendo su vigencia como tal: grandilocuente, soberana, dominando el espacio, absorbiendo el entorno que la rodea.

Interior. Recorriendo el Templo
   Al ingresar al templo ya somos sorprendidos en el arte por la imponente puerta de madera tallada, obra del prestigioso artesano Carlos Pibernat. Donada a la Catedral junto con los faroles por la Señora Margarita Rams de Madariaga.
   El primer templo, una primitiva capilla de paja y terrón, fue construído por el primer cura Pbro Arias Montiel, el segundo, más amplio y mejor que el primero, ubicado más al sur que el precedente, duró unos ochenta años y poco valía como edificio y lugar dedicado al culto.

   El 11 de noviembre de 1807 el entonces cura párroco Pbro Dr. Antonio Gil y Obligado, bendijo y colocó la piedra fundamental del tercer templo parroquial. Tardó más de veinte años en concluirse. Este edificio fue destruído para dar lugar a la actual Catedral, cuya piedra fundamental fue colocada y bendecida el 1º de enero de 1883, por el señor obispo Dr. José María Gelabert y Crespo.
Desde el tercer templo era Catedral- 1829-1883-

   Nuestra Catedral tiene planta en forma de cruz latina, la nave central está separada de las laterales por una importante columnata armónicamente distribuída.

   En el interior somos deslumbrados por la magnificencia de esta obra. Su nave central de 12 metros de ancho, custodiada por 16 columnas de mármol de Carrara, procedentes de La Casa Buselli e hijos ( Italia), Los Bruselli eran grandes escultores en aquellos tiempos. Los capiteles corintios y los fustes romanos lo atestiguan. Estas son las únicas de mármol, pues las restantes de las 92 en total son de material estucado, con una imitación tan perfecta del mármol en el juego de sus vetas que es necesario observar con detenimiento, para reconocer la autenticidad de los materiales.
Visita guiada a la Catedral de Paraná, Nuestra Señora del Rosario.

Las otras dos naves tienen 9 metros de ancho y en ellas están instalados los altares.
La iluminación natural que se filtra por las distintas linternas distribuidas en el techo y los vitrales laterales, generan una iluminación homogénea adecuada a un espacio de culto y recogimiento.

Vitrales-1892-
Treinta y tres fuentes de luces centrales rompen en haces de colores sobre el Altar Mayor, dejando ver el rico joyel de sus vitrales. Además de la iluminación cuentan con el gran contenido catequístico de las grandes Catedrales. Fueron comprados en la Casa Bergés y Cia, con talleres en la ciudad de Toulouse ( Francia ). Están hechos con cristales pintados y cocidos a fuego. Representan los misterios del Santo Rosario, distribuídos a la derecha de la nave central, los Gozosos, a la izquierda, los Gloriosos y en el Camarín de la Virgen, los Dolorosos.

Altares.
Corresponden a distintas advocaciones de la Virgen y de los Santos.
Son once, de madera tallada. Su estilo, barroco afrancesado. Estucados y laminado en oro.

Altar dedicado a San Ignacio de Loyola.
Entrando por la nave derecha del Templo nos encontramos con esta obra, realizada en madera estucada en oro. Dedicada al Santo fundador de la orden de los Jesuitas. A la izquierda del altar,la imagen de San Francisco Javier, discípulo de San Ignacio y gran predicador. Recorrió el Asia, Japón y al llegar a China muere, habiendo transitado un extenso camino de conversión de millones de almas. Arriba San Blas, el médico milagroso, patrono de las enfermedades de garganta. Abajo a la derecha la imagen de Santa Rita, abogada de los casos imposibles. Este altar tiene una artística vidriera francesa.( el cuerpo de la Santa, en Italia, permanece incorrupto).

Altar de San Pedro
San Pedro, fue el primer Papa y mártir. Murió crucificado cabeza abajo. Esta imagen tiene tiara y manto, y en la mano izquierda las Llaves del Reino y la derecha, en actitud de bendecir.
En la parte superior del altar una imagen de San Vicente de Paul, el patrono de las obras de beneficencia y de caridad.
En el piso advertimos la placa de la tumba del primer Obispo Mons. Gabriel Segura y Cubas.
A continuación la puerta que da a la galería, y la pared que formó parte del tercer templo que se dejó como testimonio.

Altar de la Virgen de Itatí.
El nombre de esta advocación en guaraní significa “Punta de Piedras”y es Patrona de las provincias de Corrientes y Misiones.
Fue coronada por el Obispo Mons. Rosendo de La Lastra y Gordillo en 1899. En la parte superior vemos un hermoso cuadro que perteneció a la primera Catedral, representando a la Santísima Trinidad. Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Pasando al siguiente nos encontramos con: San Antonio de Padua, al centro. En su costado izquierdo, San Alfonso María Ligorio, patrono de los abogados. A la derecha, San Roque protector de los enfermos. En la parte superior un cuadro español de Nuestra Señora del Perpétuo Socorro.
Siguiendo con nuestra visita, en un nicho, encontramos una hermosa imagen de la Virgen Nuestra Señora del Valle. Patrona de Catamarca.
Seguidamente encontramos otra imagen de vestir, de procedencia española de gran belleza.representa a Jesús el Nazareno

Altar del Sagrado Corazón de Jesús.
En él está el Sagrario, con la presencia real del Señor. Allí se puede recibir la Eucaristía todos los días por la mañana en una celebración especial. Es el altar más importante del Templo, y se lo señala con una luz permanente.
Incesantemente se arrodillan los fieles cristianos invocando una oración para acercarse a Dios y alabarlo.
Acudimos a El en nuestros momentos de alegría y de tristeza, para agradecer, alabar o pedir. En el centro del Altar, la imagen de Nuestro Señor Jesucristo mostrándonos su Corazón. Arriba a la izquierda, Santa Rosa de Lima, patrona de América. En el centro San Juan Bautista, el precursor de Jesús A la derecha Santa María Margarita Alacoque que tuvo la visión del Corazón de Jesús y le pedía honrar los primeros viernes de cada mes, difundiendo el culto al Sagrado Corazón de Jesús.. Abajo a la izquierda San Francisco de Asis. Predicador del Evangelio, y en el que el Señor imprimió sus llagas. Por último la Virgen de la Medalla Milagrosa. Antecesora de la Virgen de Lourdes.
En la base se encuentra la tumba del quinto Obispo, Mons. Julián Martínez.
A continuación y subiendo, nos encontramos con la Virgen de los Dolores. Imagen española de vestir de gran expresividad. Nos muestra a la Santísima Virgen con su corazón atravesado por siete espadas. Representan los dolores que iba a sufrir su Divino Hijo, 1) la profesía de Simeón, 2) la huída a Egipto 3) el Niño perdido en el Templo, 4) su encuentro con Jesús cargando la cruz, 5) la Crucificción del Señor, 6) al recibir en sus brazos el cuerpo sin vida de su Hijo, 7) cuando lo depositó en el Sepulcro.
Si miramos hacia arriba, en un nicho, su madre Santa Ana, en la pared del frente y arriba, San Joaquín su padre como protegiéndola.

Seguimos con el Altar de la Virgen Nuestra Señora de Lujan:
La imagen es réplica de la que se venera en la Básílica de Luján, Provincia de Bs. As. Patrona de la República Argentina. El altar es posterior y fue hecho por un artesano de Paraná, en los talleres de la Casa Baglietto.
Pasamos por el costado del Presbiterio, donde se encuentra el Altar Mayor, allí se celebra diariamente la Sagrada Eucaristía, y nos dirigimos hacia el ábside de la Catedral y Camarín de la Santísima Virgen Nuestra Señora del Rosario. Imagen histórica con bastón de mando y un hermoso rosario. Por mucho tiempo presidió las proseciones honrando nuestra ciudad. La feligresía respondía con canciones, arrojaba pétalos de rosas y agitaba pañuelos. Como medida preventiva para su conservación, se la reemplazó por una réplica para estos acontecimientos.
Fue coronada en 1973, por Mons. Antonio Caggiano siendo Obispo Mons. Adolfo Tortolo, en cumplimiento de un decreto del Papa Pablo VI, de fecha 8 de febrero de 1973.
Desde la entrada la visual nos lleva al “espacio celebrativo sagrado”.
El espacio sagrado cristiano, es el lugar de la asamblea litúrgica- celebración eucarística. El presbiterio sede del obispo, Presbíteros, ministros.Ambón. Mesa. Si el presidente es “icono de Cristo cabeza del cuerpo de la Iglesia”, la Sede es su lugar específico.

Cúpula
La gran cúpula que corona el crucero de las naves se constituye en un elemento deslizante de la visual, destacando el centro del edificio, el cual se ve resaltado por el uso de la luz natural, desde su propio centro. Esto se logra por medio de la linterna colocada en la parte superior de la cúpula.
Tiene 11 metros de diámetro y una altura de 54 metros, desde el nivel de piso.
Tiene un basamento de columnas y vitrales con imágenes bíblicas y de Santos de gran belleza. Está sostenida por cuatro mazos de columnas, que dan solidez a las dos pequeñas cúpulas que están a los lados del Presbiterio. El crucero remata con dos semi-cúpulas. Dando lugar a los altares de Sagrado Corazón y de la Inmaculada Concepción.
Atras y arriba La Catedral cuenta con un órgano que acompaña las Celebraciones y se brindan conciertos.
El órgano, fue instalado en 1.906, es alemán, de la Fábrica Bach. El mueble es de ébano y el doble teclado de marfil. Tiene mas de 2. 000 tubos metálicos. Se ha recibido la visita de organistas de renombre. Se realizan conciertos de coros y orquestas.

Altar de la Crucifixión
En la nave izquierda encontramos el altar más antiguo. Representa la crucifixión de Nuestro Señor, con la Santísima Virgen y Juan el Evangelista .Jesús le encarga que se haga cargo de su Madre,y a la Virgen le dice:“Madre ahí tienes a tu Hijo, Hijo ahí tienes a tu Madre” Desde ese momento es Madre nuestra.
Corona el altar, una réplica del Santo Sudario. Abajo San Luis Gonzaga y San Judas Tadeo
Este Altar fue el primero que se colocó en la primera Catedral.
Seguidamente una imagen de la Virgen Niña.

Altar de la Inmaculada Concepción
Esta imagen es vinculada con la iniciación del mes de María, antigua devoción que fue traida por el Gobernador Echagüe desde la Banda Oriental, donde se había trasladado para combatir con Rivera. El general encontró la cabeza y las manos de madera de una antigua imagen de la Virgen, solicitó estas piezas que obsequió a su esposa, ella le confeccionó el cuerpo y la vestimenta bajo la advocación de la Inmaculada Concepción. Tiene cabellos naturales y corona de Plata.
Por mucho tiempo esta imagen presidía en la casa familiar de esta Señora el mes de María, al que concurría el vecindario . Años mas tarde pasó a ser patrimonio de la Catedral por voluntad de su dueña. Están en este altar la imagen de San Vicente Ferrer, gran devoto del Santo Rosario en el siglo XV.
En la parte superior y a la izquierda, San Pedro Alcántaras, consejero de Santa Teresa, en el centro, San José con el Niño.y a la derecha San Pascual Bailón, quien propagó la devoción al Santísimo. Debajo San Nicolás de Bari. En este altar está la sepultura de Mons. Adolfo Tortolo, fallecido el 1º de abril de 1986, a su pedido .

Seguidamente : la vitrina del Cristo Yacente, una imagen española que como todas las expresiones del arte barroco, manifiestan un realismo notable, muy querido por los creyentes. Es característico encontrar aquí muchos mensajes o peticiones que dejan los devotos. La vitrina también fue hecha en la Casa Baglietto de Paraná. En la pared , una Cruz de madera recuerda la Misión de 1930.

Altar de la Virgen del Carmen
Esta imagen fue traida desde Barcelona ( España ), en 1865 por pedido de los integrantes de la Cofradía de Nuestra Señora del Carmen de la Catedral. Arriba San Francisco Solano, el patrono del folklore.

Altar de la Virgen de la Merced
Patrona del Ejército Argentino. Arriba la imagen de San Ramón Nonato. Patrono de los nacimientos
Otra puerta que comunica a la galería izquierda

Altar de Santa Teresita
Este altar es el último, más moderno y único de mármol con incrustaciones de bronce. Se utilizó ónix del país y algunos importados. Un importante marco de bronce tallado con guirnaldas de rosas encuadran la imgen de la Santa rodeada de ángeles. En la parte superior decorados en mosaicos de gran belleza. Debajo del altar se encuentran reliquias de Santa Teresita.
Al frente, en el basamento de las columnas, hay una inscripción grabada indicando la procedencia italiana y la fecha en que fueron confeccionadas.

El bautisterio
El lugar del edificio sagrado destinado para realizar los bautismos de la comunidad. De una belleza serena. La pila bautismal es octogonal decorada con símbolos episcopales. El gran cuadro alegórico, que hace de fondo, es obsequio del Vaticano.
Es de destacar la Pila Bautismal que perteneció a la primera Catedral. En ella recibió el Bautismo el cacique Manuel Namuncurá, padre de Ceferino, el indiecito santo. El General Urquiza lo hizo bautizar y fue su padrino. Situada a la derecha de la puerta principal
Dos confesionarios complementan la ornamentación. Son de madera tallada, de gran sobriedad.
Los diversos motivos que observamos en los mosaicos de los pisos, y la combinación de estilos de los mismos, venecianos y moriscos conforman una serie de cuadrados y rectángulos que se repiten, para el armado armónico del espacio. Son elementos que contribuyen al logro de una concepción espacial que posee toda la delicadeza , serenidad y limpieza propias del estilo renacentista.

Fachada Principal:
Corresponde a las concepciones del Arquitecto A. Palladio, quien influenció en la formación de los arquitectos del siglo XIX. Muchos de ellos se trasladaron a nuestro país trayendo consigo éstos principios creando una corriente que contribuyó a formar una arquitectura palladiana. Él llegó a concebir un espacio de transición entre el edificio y su entorno. Este espacio lograba la integración de ambos elementos por medio de una gran columnata que remataría en un frontis griego. Como complemento agregaba tres esculturas en cada vértice, correspondiéndole al vértice superior el Cristo Redentor. El proyecto original de Arnaldi, contemplaba las tres estatuas.
El Cristo Redentor es del 6 de abril de 1901 y es de bronce. Obra de Domingo Di Carli, y es copia del que se encuentra en la Cordillera de los Andes, en el límite con Chile. Fue bedecida en el año 1910, por Monseñor Rosendo de la Lastra y Gordillo.
El plano posterior de las 6 columnatas ha sido tratado por cinco arcos de medio punto. El espacio central se ve jerarquizado del resto mostrando el ingreso principal, logrando así una exaltación de majestuosidad, sin necesidad de ostentación. Estas columnas que embellecen el atrio, -- espacio congregante para muchas actividades de jerarquía culturales y sociales de la Ciudad y la Provincia -- con capiteles corintios con hojas de acanto y querubines, están formados con cuarenta y ocho piezas diferentes esculpidas en el taller italiano de Escultura y Yesería, de Giraldoni en Paraná. Completan el espacio doce escalones de mármol que asentúan aún más su magnificencia.
En una de las torres, está colocada la campana de los Canónigos que pertenecía a la primera Catedral, y que fuera fundida en 1866, por orden del 2º Obispo, José María Gelabert y Crespo, con metales preciosos que el pueblo de Paraná fue depositando en un crisol que se encontraba en el patio del Obispado. En ese entonces
la Curia ocupaba la ex residencia del Gral. Urquiza, que estaba en el solar en donde hoy se levanta el edificio del Correo Central.
Las dos torres frontales son de estilo barroco, por el trtamiento en el movimiento de los muros, es decir , en los entrantes y salientes. Vemos con que elegancia y calidad se produce la elevación de las mismas. Por último tenemos el cupulín , formado por una serie de curvas que se van estrechando hacia arriba para rematar en una cruz de hierro forjado.
Completan la fachada cuatro rosetones y una ventana. Los primeros provienen del gótico tardío, Arnaldi los ocupó también en la Catedral de Rosario. La ventana renacentista está formada por un vano rehundido, que a su vez tiene dos ventanas más pequeñas con la misma forma y un medallón en el medio. Son las mismas que aparecen en el basamento de la torres del frente, cuya finalidad fue iluminar las escaleras por donde se accede al campanario y al coro..

San Pedro: (1897)
Esta imagen, realizada por Domingo Di Carli en Italia, fue donación de un generoso vecino Don León Solá que firmó contrato en Génova por un costo de 10.000 francos. Es de mármol de Carrara y fue realizada con los atributos del Papa, la Mitra, el manto, las llaves del reino en su mano izquierda y la derecha levantada en actitud de bendecir. Tiene 4 metros de los pies a la cabeza y su base es de 1.50 mts.
En una carta remitida por Di Carli a un industrial de Paraná, le comentaba “que está, por esbozar un colosal bloque de mármol que parece casi una montaña. Le diré, que no se encontraron carros ni vagones para sacarlo de la cantera, por lo que me ví obligado a llevar un pequeño modelo de la obra para adelgazarlo y poderlo trasladar”.
En el peristilo observamos varias placas que cubrían tumbas de prominentes sacerdotes, que están sepultados en el interior del templo. Lo del Dr José Azebedo, sacerdote de un gran predicamento, Párroco de la Iglesia de Nogoyá, fallecido en 1858 y la de Mons. Dr Miguel Vidal, fallecido en 1865.

Este trabajo se realizó con datos bibliográficos que pertenecen a historiadores locales:
César B. Pérez Colman, Entre Ríos, Historia .
Alfeo Zanini, “Páginas de Oro”de la Ciudad de Paraná, en su Centenario.
Aníbal S. Vásquez, Dos Siglos de Vida Entrerriana.
Ofelia Sors. “Paraná. Dos siglos y cuarto de evolución suburbana.1730-1955”.
Benigno T. Martínez, Historia de la Provincia de Entre Ríos.
Juan J. Antonio Segura, Historia Eclesiástica de la Iglesia.

Paraná, junio de 2016.
Elena Beatriz Perelstein de Giunta.-

Es la casa de oración. Es lugar de encuentro de la Familia de Dios. Es monumento de fe que nos legaron nuestros antepasados. Es una obra de arte, expresión de un momento histórico, cultural.
La preservación de los bienes culturales de la Iglesia, depende también de nosotros.
¡Muchas gracias por su visita!

No hay comentarios:

Publicar un comentario